jueves, 26 de mayo de 2011

MÁS QUE UN PUNTO DE CONEXIÓN-ZOLIA Y. MENDOZA (ZOEY)

Guayaquil, considerada la capital económica del Ecuador y la ciudad más grande y poblada del país, es aún, un destino turístico escasamente promocionado.  En la actualidad, para los turistas funciona como un punto de conexión hacia otras ciudades importantes de nuestro país como son Quito o Galápagos, pero pocas veces como un destino turístico final, en el que considero vale la pena detenerse.
Quizás nuestra condición de puerto ha influido a través del tiempo en el carácter de los guayaquileños, creando una cultura abierta y desinhibida ante nuevas ideas, sonidos y sabores que hacen de Guayaquil una ciudad de contrastes que por un lado defiende su identidad y por el otro se adapta a los cambios.
Es por el orgullo de sentirme guayaquileña que nace este proyecto, el cual pretende revelar a través de las imágenes una pequeña muestra de lo que pueden llegar a descubrir al visitar Guayaquil. Empiezo con un recorrido visual de los vestigios arquitectónicos de su era colonial, que se fusionan con la infraestructura de una ciudad moderna.  Seguido de  una muestra de su cultura a través de su gente, su comida, sus artesanías y actividades.  El objetivo final es poder sembrar en el turista el interés por recorrer nuestras calles, apreciar nuestra gastronomía, y disfrutar de la compañía de nuestra gente. 
Zoey, Mayo del 2011.


 
Así se levanta Guayaquil con el sol reflejado en las calmadas aguas del Rio Guayas, que con solo contemplarlo transmiten una sensación de paz en quien lo mira.



En uno de los muelles del Malecón, descansa el Buque Escuela Guayas, el cual intensifica la imagen de puerto que caracteriza a Guayaquil.



Frente al Río Guayas, con una extensión de 3km aproximadamente, se encuentra el Malecón 2000, un parque urbano que cuenta con espacios de cultura, naturaleza, gastronomía y entretenimiento.




El hemiciclo de la Rotonda, conmemora el encuentro que tuvieran Simón Bolívar y José de San Martin en esta ciudad, cuyo objetivo fue definir el futuro de la emancipada Guayaquil  y concretar la etapa definitiva de la independencia sudamericana.



Los balcones y los portales forman parte del diseño de muchas de las casas antiguas de la ciudad, se pueden observar en las casas del barrio las Peñas y en el centro de la ciudad.















Las Peñas, ubicado en el cerro Santa Ana, es el barrio más antiguo de Guayaquil, que aun conserva casas con más de un siglo de historia.  Restaurado hace pocos años, hoy es el hogar de muchos pintores y artistas que encuentran aquí su inspiración.



La Bahía es una vasta zona comercial, que atrae a propios y extraños por sus asequibles precios pero sobre todo por la posibilidad de regatear y conseguir un precio aun mas bajo.



Comerciantes de otras provincias del Ecuador llegan a Guayaquil para ofrecer sus productos, es así que al recorrer los mercados artesanales no solo encontrará diversidad de productos si no también diversidad de culturas.



La catedral de San Pedro o Catedral de Guayaquil, reconstruida en 1948  con un estilo neogótico,  es uno de los símbolos religiosos más importantes de la ciudad, frente a ella se destaca el parque Seminario conocido como Bolívar o Parque de las Iguanas.



Las iguanas son residentes ancestrales de la ciudad que conviven diariamente con miles de ciudadanos sin el menor temor, es tanta la cercanía con ellas, que los guayaquileños muchas veces olvidan que son animales silvestres y los tratan como sus mascotas.






 
La plaza de la Administración, es la extensión de lo que fue la plaza Sucre y que se encuentra ubicada en medio de varios edificios administrativos como son la Gobernación, el municipio y el Consejo provincial.  





El palacio municipal de Guayaquil, fue construido a inicios del siglo XX bajo un estilo neo-renacentista con el fin de evocar monumentalidad, en la actualidad, se considera como una de obras arquitectónicas más importantes del país. 






La gastronomía guayaquileña es amplia y diversa, tanto en lo que es comida típica como en la comida internacional.  Está al alcance de todo bolsillo y es muchas veces en esos “huequitos” (lugares de comida sencillos) donde se come más rico.









Cazuela, plato típico que contiene dos de los ingredientes más consumidos en la dieta guayaquileña: “verde” (plátano verde) y  mariscos.  






 
El Hornado de Chancho, original de la sierra ecuatoriana, ya es parte del menú de los guayaquileños, tanto así que existen lugares en los cuales se forman largas filas solo para deleitarse con uno de estos platos.








El salir y reunirse con los amigos en algún lugar de la ciudad es algo siempre presente en la agenda de los guayaquileños, que empieza con un piqueo para compartir acompañado de una “biela” (cerveza) en esas noches de calor.





 

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